Sabemos que las opciones al momento de elegir los productos de tu rutina facial son muchísimas, desde rutinas con más de 10 pasos, que parecen algo inalcanzable con lo cansada llegas a casa, hasta las más minimalistas, con productos multipropósito que prometen hacer más de 5 cosas por tu piel. Como siempre, nosotras elegimos el equilibrio, una rutina sencilla, fácil de usar y con los pasos esenciales para lograr resultados en tu piel. Hoy quiero platicarte porque para nosotras el tónico facial debe ser un básico en tu rutina y de todo lo que te estás perdiendo si aún no te animas a probarlo.

Un tónico facial es una solución acuosa ligera que puede contener diferentes activos, dentro de la rutina NAE corresponden al segundo paso, justo después de la limpieza. Aunque pudiera parecer que te estás poniendo “solo agua”, en realidad estás preparando la piel de tu rostro para aprovechar al máximo el resto de rutina.

Las 2 funciones básicas de un tónico son: hidratar la piel y balancear su pH después de la limpieza, mantener los niveles de agua y pH en sus niveles óptimos ayuda a que nuestra piel mantenga su equilibrio y las células puedan realizar adecuadamente funciones como la regulación de grasa, la producción de colágeno o su regeneración.

Un tónico debe tener un pH bajo (ácido) que contrarreste el pH alto (básico) de los jabones/limpiadores faciales, esto ayuda a los mecanismos reguladores del pH de la piel a mantenerlo en su nivel óptimo (alrededor de 5). También durante la limpieza, nuestra piel se expone a la fricción y a los componentes de los limpiadores que ayudan a retirar la grasa y la suciedad, así que la aplicación de tu tónico ayuda a refrescar e hidratar tu piel después de este paso. Mantener un correcta hidratación ayudará a que los activos del resto de tu rutina se absorban y aprovechen mejor.

 ¿Sabías que los tónicos NAE no contienen agua como ingrediente base? Usamos en lugar de agua extracto de aloe vera, que además de tener un alto contenido de agua, contiene ingredientes como minerales y polisacáridos que ayudan a nuestra piel a retener esta hidratación que le estamos dando. Para potenciar sus efectos, incluimos en cada uno de nuestros tónicos diferentes activos extras para atacar problemas específicos de la piel: hidrosol de hamamelis y árbol de té para controlar la producción de grasa ( tónico línea balance), extractos de rosas y jamaica que favorecen la regeneración de la piel y aportan antioxidantes (tónico línea regenerativa) y caléndula y manzanilla para ayudar a reducir rojeces e inflamaciones (tónico línea piel sensible).

También quiero aprovechar para responder una de las preguntas que más nos hacen respecto a los tónicos: ¿Cómo se aplican? Nosotras preferimos aplicarlo directamente del spray (de 2 a 3 atomizaciones) que usando un algodón. Además de ser más práctico y ecológico, usas menos producto (el algodón absorbe producto cuando lo usas como aplicador), evitas la fricción del algodón con tu piel y te regalas esos segundito de paz para consentirte y sentir la brisa de tu tónico favorito en tu carita.  

Ahora sí, ya estás listo para incluir un tónico NAE en tu rutina. Si no sabes cuál elegir puedes contestar nuestro cuestionario de personalización para descubrirlo.